Jean M. Auel."El Clan del Oso Cavernario" (Editorial Maeva)
lunes, 4 de febrero de 2008 by Cristina Górriz de la Cal
El viaje es una experiencia que puede traspasar fronteras geográficas pero también temporales. Y esa barrera es la que cruza Jean M. Auel con “El clan del Oso Cavernario”. Nada más y nada menos que 40 .000 años atrás.
La primera novela de la saga "Los Hijos de la Tierra" de la autora norteamericana es suficiente para imaginarse cómo debieron ser unos humanos incipientes, que comenzaban a fabricar sus primeros utensilios de piedra, habían descubierto el fuego, se iniciaban en la comunicación gestual y oral, además de manejárselas como nadie en la naturaleza.
Seguir Leyendo... Sin duda alguna, esta descripción es una simplificación del concepto de Prehistoria, en concreto de la época Paleolítica, pero lo que no se puede negar es que Jean M. Auel recrea de forma espectacular el periodo más largo de la historia humana que ocupa el 99% de nuestra existencia. La proeza es mayor si se tiene en cuenta que la Prehistoria es la etapa anterior a la invención de la escritura, es decir, antes de que los seres humanos pudiéramos dejar rastro escrito de nuestro pasado.
Hemos necesitado de todo ese tiempo para conformarnos tal y como actualmente nos vemos en el espejo: somos seres sociales que caminamos erguidos y nos comunicamos con el lenguaje gracias a un cerebro de grandes proporciones (si lo comparamos proporcionalmente con el resto de nuestro cuerpo, claro está). Pero nuestra línea evolutiva no ha sido un camino de rosas. Al estilo de los ensayos científicos, la evolución humana ha realizado una serie de pruebas de fallo-error hasta conseguir adaptarse a las circunstancias cambiantes: que si una glaciación por aquí, que si ahora pasamos de bosque frondoso a sabana, que si nos toca competir con otros animales por la alimentación, ...La cuestión es que numerosos modelos humanos desaparecieron por el camino, como es el caso de los Neanderthales, mientras que uno de ellos consiguió sobrevivir: el Homo Sapiens, nuestro antecesor.
Y es este preciso momento el que retrata “El clan del Oso Cavernario”: La convivencia forzosa de una clan Neanderthal (especie que vivió en Europa y en partes de Asia) y una hembra Homo Sapiens que aparece en su camino. Aunque antropológicamente no existen evidencias suficientes del entrecruzamiento de estas dos especies, la originalidad del libro radica en mostrar los matices de estas dos líneas de nuestra evolución que los neófitos tendemos a incluir en el mismo saco. Elementos que siguen siendo de una rabiosa actualidad como la marginación de la mujer en la sociedad, la importancia de los ritos religiosos, la competitividad o la dificultad de la convivencia entre dos culturas diferentes.
Pero hay una cosa que Jean M. Auel destaca sobre las demás: nuestros antepasados eran tan inteligentes, creativos y humanos como cualquier persona de hoy en día.
* Para saber más: O bien continuar con la saga “Hijos de la Tierra” o bien adentrarse en el terreno audiovisual con "En busca del Fuego" (Jean Jacques Annaud 1982).