Ferran Torrent - "Judici Final" (Bromera/Columna/Planeta)
sábado, 17 de noviembre de 2007 by Juan E. Tur
A principios de la presente década, el escritor valenciano Ferran Torrent se metió en un embolado de imprevisibles dimensiones. A meses de unas elecciones autonómicas en la Comunitat Valencia -la suya- en las que no estaba segura la continuidad de la hegemonía del gobierno (ante la posibilidad principalmente de la irrupción de un partido nacionalista hasta entonces sin representación), Torrent se propuso realizar una trilogía de obras inspirada en el panorama político valenciano. Una empresa en la que, cambiando ligeramente nombres y situaciones y con la libertad que permite la ficción y el adelantarse a los aconteciomientos, describiera la trastienda de la escena política valenciana.
Así vio la luz en el 2002 la primera entrega de la trilogía, una Societat Limitada en la que los dirigentes del partido nacionalista se las ingeniaban para, engañando a unos y otros, conseguir un crédito bancario con el cuál financiar una campaña que les permitiera obtener la representación parlamentaria que decidiría el próximo gobierno. El libro era divertido, con una trama muy entretenida que mostraba a grandes rasgos las intrigas que se urden en las bambalinas de la escena política, y además tenía el aliciente de proponer un juego de identificaciones -bastante evidentes lo que las hacía más jocosas- entre los personajes ficticios y algunas figuras de la política local.
Sin embargo, la hipótesis que barajaba Torrent de que el partido nacionalista obtendría representación parlamentaria no se vio refrendada en las elecciones, y en la segunda entrega, Espècies Protegides, la trama ya se desvió notablemente de la realidad política valenciana. Esa coyuntura llevó el escritor de Sedaví a permitirse más libertad para fantasear y trasladó el peso principal de la acción a Juan Lloris, un campechano empresario local, despechado por el desprecio de sus colegas, que decide ganarse su respeto y el de la ciudad a través de convertirse en el presidente del Valencia CF. El resultado fue una historia más fantástica que su predecesora, casi un sainete, repleto de humor, en el que el autor además se permitía lanzar una serie de conjeturas acerca de extraños fenómenos (la quema indiscriminada de coches) que tenían lugar por entonces en la ciudad de Valencia.
Todo esto viene a cuento porque, para cuando Ferran Torrent se enfrentó a la tarea de escribir la tercera y última entrega de la saga, seguramente poco quedaba de la idea inicial que llevó al escritor a plantear semejante empresa. Es quizá por eso por que Judici Final es, de las tres, la novela menos sólida, la menos apegada a la realidad local y autonómica que pretendía reflejar la trilogía, y también la que menos se puede disfrutar de un modo independiente. Y es que a ella hay que llegar con la lección aprendida, sabiendo quién es quién, porque a penas se da ningún esbozo de los personajes ya presentados en las anteriores partes.
Avisados ya de eso, los que se adentren en ella, seguramente lectores de las anteriores y posiblemente seguidores del autor, verán como los principales actores de la trama precedente ceden esta vez el protagonismo a Liam Yeats, un asesino profesional que viene contratado para acabar con la vida de Juan Lloris antes de que se erija alcalde de la ciudad tras su exitoso paso por la presidencia del Valencia CF. Y eso no es todo, porque los encargados de desmontar todo el complor serán ni más ni menos que Toni Butxana y el comisario Tordera, dos de los personajes más emblemáticos de la bibliografía de Torrent a los que, como a la trilogía, el escritor da carpetazo haciéndoles coprotagonizar esta aventura.
Así Judici Final se convierte en una especie de festín para los fans del escritor, un fin de fiesta privado, para los iniciados, que no disfrutarán los profanos a la obra de Torrent o a la propia trilogía. Pero también en una obra en la que, al soltar tanto lastre, el escritor marcó sin duda un punto y aparte en su carrera. Veremos qué nos depara su próxima entrega, que a estas alturas debe estar al caer.
Com és que ningú no comenta que la trilogia s'ha inspirat en aquella obra que llegeix la dona d'en LLoris a la primera part: La Cartoixa de Palma?